Terminó levantando el nivel de juego Gimnasia y Tiro en los últimos 15 minutos de la primera parte y eso es lo que más quedó en la retina de los presenciales del partido.

Es que el local tuvo no menos de 5 ocasiones muy claras para convertir, pero se topó con una actuación espectacular de Álvaro Ramírez, el uno del Lobo, que fue invulnerable a la hora de intervenir.

Sportivo en la primera parte de esos 45 minutos le jugó bien, le entró por el sector central que era por donde más le dolía a Gimnasia. El Lobo fue el denominador hasta la media hora de juego teniendo un par muy claras, un par de atajadas del arquero Silva, y la que tuvo Agustín Lavezzi que se estrelló en el vértice de palo con travesaño, pero no logró convertir.

En líneas generales, la primera parte fue para el Rojiverde y los últimos 15 para el equipo salteño, el empate le cayó bien a esos primeros 45.

En el complemento, el primer cuarto de hora fue netamente en favor del local, donde lo batalló por toda la cancha y probó desde donde pudo, pero lo encontró bien parado a Sportivo y no lograba convertir.

Pero de allí en más comenzaron a gravitar los errores del árbitro y de la terna arbitral, ya que a los 21 de esa segunda parte una clarísima falta dentro del área de Gimnasia contra Mauro Siergiejuk, donde el árbitro no vio cuando le clavaban un codazo en la garganta al hombre de Sportivo y le privó de la posibilidad de ejecutar una pena máxima.

Unos minutos después Romero de Sportivo se choca con un atacante salteño afuera del área, donde quizás ni falta existió, y el árbitro Jonathan Correa lo expulsa a Maximiliano Romero y cobra penal (afuera del área).  Ramírez se lo ataja bien, reglamentariamente a Guido Di Vianni y el línea levanta la bandera indicando un adelantamiento que no existió, debiendo patearse de nuevo y allí sí, Di Vianni lo convirtió ante el reclamo de los hombres de Sportivo y la bronca que bajaba desde el banco de suplente.

A los 39 se fue expulsado Julián Acosta por una falta con pierna levantada en la mitad de la cancha y El Lobo se quedó con 9 jugadores. Lo ganó Gimnasia con un penal inexistente y lo perdió Sportivo que había hecho méritos para, por lo menos, traerse a Las Parejas un punto que hubiese sumado para alimentar esperanza para una supuesta clasificación.

 

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