Nos enterábamos de la difícil situación económica que está atravesando el Centro de Día de la Asociación para la Inclusión del Discapacitado, APID, incluso hasta evaluar la posibilidad del cierre del mismo.
Conversamos en Radio Las Parejas con el Presidente de la Asociación,
Carlos Serafini, que nos pintó con sus palabras la dura realidad de este Centro en la actualidad.
Radio: ¿Ha empeorado la situación económica de APID?
Carlos Serafini: “Sí, esto no viene de ahora, sino que ahora se profundizó más aún. Esto viene de antes de la Pandemia, donde veníamos con una diferencia negativa con los aportes de las obras sociales entre un 40 a 45%, más allá de los atrasos en los pagos que `Son Normales´, nosotros ya habíamos hecho una cadena, pero el tema está entre los que debemos abonar mensualmente con lo que aportan las obras sociales.
Por el régimen que tienen los Centros de Día, es obligación tener todo el personal inscripto, caso contrario deben estar con un contrato y eso lo tenemos como corresponde, y lo que intentamos es cumplir con ellos, con los que están inscriptos las leyes sociales son terribles de elevadas, tenemos 10 personas inscriptas y no hay forma que eso pueda cambiar y nos ha generado una deuda altísima desde hace 2 años y que gracias a Dios, la Nación condonó una parte de esa deuda, arriba de un millón de pesos, y la otra parte la vamos cubriendo con ayuda del municipio porque se hacía insoportable poder pagarlo, quedándonos otros 700 mil por pagar con la AFIP. Hemos tratado de ir manteniendo los sueldos y lo demás quedó pendiente. Nos pone entre la espada y la pared, porque no podemos achicar personal porque nos bajarían de la categoría A que tenemos y sería perjudicial porque cobraríamos mucho menos de lo que estamos cobrando ahora”.
R: ¿Hay aportes del gobierno, provincial o nacional?
CS: “De los gobiernos no recibimos nada, excepto en este momento donde el Municipio nos está ayudando a pagar esa parte del arreglo con la AFIP, y además solo, lo que recibimos es el pago de cada joven que va al Centro, con su obra social y en este último tiempo lo que hemos logrado con el Intendente Compagnucci es conseguir fondos de la Provincia o de la Nación, a través de Acción Social para poder arreglar un poco el edificio porque hemos tenido mucha entrada de agua, con rotura del cielorraso y de la pared, y eso lo hemos conseguido y estamos a muy poco de poder recibirlo”.
R: De bajar de categoría, ¿en qué se perjudicaría la Asociación?
CS: Recibiríamos menos dinero, porque por categoría A hay un monto que se llama el pago por módulo de cada chico que son los abordajes que se hacen de cada uno de ellos en el Centro de Día, y la A, que es la que tenemos, es la mayor y se determina por personal, cantidad de chicos, espacio y por mobiliario que tiene ese espacio, y si reducimos personal nos bajan de categoría porque se baja la calidad del servicio que se ofrece”.
R: ¿Cómo se sale de este atolladero?
CS: Es la pregunta que siempre nos estamos haciendo; venimos de hacer arroz con pollo, té, y la verdad que la gente que trabaja tienen una predisposición bárbara, y además dentro de la Asociación, hacemos un aporte al Centro de Día, porque necesitan materiales, toman la merienda, se reponen determinadas cosas, pero no le sabemos encontrar la vuelta a esto porque los gastos están, no hay forma de sacarlos, más allá que hay gente que se ha enterado y ha colaborado, y se empezó nuevamente a cobrar la cuota de socio y cuando escuchamos de los recortes, es cierto, los estuvieron haciendo de a poco, han quitado el aporte a los remises, teniendo en cuenta que toda persona con discapacidad tiene el transporte y no lo puede utilizar porque el gobierno no lo paga”.
R: ¿Qué respuestas han recibido a los reclamos?
CS: La predisposición con las autoridades está, hablamos permanentemente con ellos, hemos presentado carpetas al área de Salud, de Educación, pero si pudiéramos conseguir que la Provincia de haga cargo de 3 o 4 personas nos sacaría un peso enorme a nosotros y sería un aporte hacia la Asociación. Golpeamos las puertas, estamos en contacto pero todavía no hay nada en el corto plazo. Cuando nos presentaron en su momento este proyecto del Centro de Día, fue y es extraordinario, pero hoy con la realidad que tenemos es imposible sostenerlo, hace unos 5 meses atrás la realidad nuestra como comisión era cerrar el Centro de Día, porque esto es simple, porque si te entran 400 pesos y gastaste 700 cómo hacés para sostenerlo, no hay forma, porque nosotros no generamos plata, somos solo un pasamano de esa plata y no tenemos forma de cómo hacerlo. En otros lugares hay personas particulares que instalan un centro de día y lo utilizan como empresa, cobran determinada cantidad de dinero y pagan cuando cobran, y sabemos que hay gente en algún otro centro que hace meses no cobra y nosotros no podemos hacer eso, porque tenemos responsabilidad con la gente que trabaja y están nuestros hijos allí, y somos una Asociación, no una empresa”.
R: Sin el menor ánimo de ser dramático; ¿peligra hoy El Centro de Día de APID?
CS: Sí, estamos en un peligro permanente, porque no le encontramos la solución a la realidad que tenemos y estamos tratando de hacer hasta lo imposible para seguir adelante. Yo agradezco a la comunidad de Las Parejas porque es extraordinaria en ese aspecto y hemos recibido en este tiempo muchísimas donaciones, de gente que para su cumpleaños no quiso recibir regalos y nos donaron el dinero de los regalos, otros que se pusieron a disposición, que nos donó plata, eso es maravilloso pero no sigue alcanzando, pero mi bronca es que, es bueno que la comunidad apoye, pero hay alguien que tiene que hacer más, porque le ponemos un espacio, un esfuerzo y quien nos tiene que ayudar no está, esa es la bronca grande que tengo y me duele en el alma”.
R: ¿Cómo le ponemos nombre a quienes se debería ocupar más?
CS: Todos los gobiernos y en todos los aspectos, y no digo las personas, porque hay quienes están y se involucran y nos ayudan, pero cuando llegamos a las altas esferas no hay nada. Lo increíble es que los fondos para la discapacidad están, no hay que hacer una nueva ley, están y adónde van esos fondos no lo sabemos. Yo voy a luchar hasta que pueda, porque sabemos que los que más van a sufrir son los 20 jóvenes que están hoy, van a quedar sin nada y sabemos lo que es eso porque lo pasamos en época de pandemia, lamentablemente ha hecho desastre y por las familias, porque nosotros que tenemos una familia grande nuestra hija está contenida, pero hay gente que está sola y no tienen otro espacio”.
