Hace unos días, lunes de la semana anterior, nos informaban que en el viejo edificio de la Parroquia local se escuchó un fuerte ruido, en horas de la noche, y fue alertado el Centro de Operaciones. Veían que salía como humo desde dentro del edificio, pero era polvillo de la caída del cielorraso de la iglesia centenaria de nuestra ciudad.
En diálogo con Radio Las Parejas, el sacerdote Cristian Salomón comentó que se venció una de las cabreadas, “es la que está por encima del altar mayor, que en una de las puntas de la misma era donde siempre caía agua en cada lluvia y se fue pudriendo, más el peso del desecho de las palomas que desde hace años moran en este lugar” sostuvo el Cura Párroco.
En más de cien años mucho no se le ha hecho para la preservación de dicho edificio, “lamentablemente es una sumatoria de responsabilidades, algunos más y otros menos, pero somos muchos lo que no hemos hecho algo para mantener este lugar que gracias a Dios se mantiene, y es por eso que mi deseo y me gustaría sea el deseo de la comunidad, restaurarlo, protegerlo, cuidarlos y reutilizarlo de algún modo para el bien de la comunidad”, resaltó Salomón, para agregar que hay cuestiones que son icónicas, esto de 1915, y son parte de la historia de una comunidad, “hay que conservar el patrimonio histórico, y eso hace que nosotros podamos seguir con vida, porque si perdemos nuestra memoria no tenemos futuro y en realidad es lo que nos pasa, por no tener memoria estamos como estamos”, enfatizó el sacerdote Cristian.
El Cura Párroco dijo que ojalá el viejo edificio pueda llegar a ser patrimonio histórico de la ciudad, “pero hay que hacer gestiones y eso depende de mí, del obispado, y si bien en el municipio veo buena voluntad todo requiere tiempo, esfuerzo, y esto que sucedió adelanta los pasos, para evitar que se caiga del todo”.
